¡Gracias a ustedes hice realidad mis sueños en meses! Adquirí una computadora nueva y por fin instalé mi negocio en casa. Ya estoy equipando mi oficina en casa, planificando la compra de la silla para mi bienestar corporal y mi escritorio soñado. Durante este año he podido hacer compras de calidad en casa sin quedarme sin dinero al momento de la compra. Pude regalarle a mi mamá zapatos y también comprar varios pares para mí, ya que tenía 5 años con los mismos pares. También he podido llevarla a comer, por lo menos una vez al mes, a un restaurante que le encanta. Equipé mi cocina, compré cosas para el hogar que no podía darme el placer de tener. Me siento afortunada además porque cuando me he retrasado, me he sentido respetada y no invadida con recordatorios agresivos, y eso me ha hecho confiar en que ustedes cuidan realmente a sus clientes. ¡GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS POR TANTO!